El reloj al fin dio las 12, y el principe se transformo en zapo, el gol en calabaza, y mi vida en una desgracia, ahora me falta él, no tengo a quien contarle mi vida, en quien confiar, aunque en el mucho no confiaba le contaba todo, en fin, la vida sigue, y mi rumbo sigue el mismo en el que venia, ahora es solo mirar adelante, seguir siendo autentica, si el piensa de esa manera el se equivoca, pero solo el sabra darse cuenta a tiempo.
Hoy, soy yo, solamente yo en este camino, acompañada a la par de los caminos de siempre, de mis amigos, de mis verdaderos amigos, asi que enfrentando cada arbol, cada piedra y saltandola con exito como hasta ahora (:
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